En la noche del jueves hubo uno de los debates más esperados de esta campaña electoral. Ya que la economía es uno de los temas que va a dominar la campaña y en la que se basan gran parte de las estrategias de estas elecciones, es lógico que se enfrentarán los dos primeros espadas en economía: Solbes, con una trayectoria económica conocida por todos y Pizarro, un recién llegado a la política que venía de presidir Endesa durante la polémica OPA.El debate, cuya moderación fue absolutamente neutral, empezó igualado pero poco a poco se vió quién tenía más tablas en economía.
El punto crítico fue a mitad del debate cuando Solbes preguntó a Pizarro como financiar los recortes de impuestos que proponía y éste, demostrando que no tienen claro como lo van a hacer, aludió a temas tan dispares como el Ministerio de la Vivienda, el piso de Bermejo o la financiación de los terroristas. Solbes contraatacó poco después diciendo que Pizarro defendía la privatización de las pensiones y éste lo negó, a lo que Solbes mostró las declaraciones de Pizarro que lo recogían. El ex-presidente de Endesa no supo qué responder y ya no pudo recuperarse en el resto del debate.
El resto del debate mantuvo un tono de moderación y Solbes hizo de profesor, dandóle algunas lecciones y explicandole cosas a Pizarro, y éste hizo de alumno, no precisamente aventajado, y mezclo datos económicos con el discurso del PP. Al final, Solbes se impuso con holgura como reconocen casi todos los medios (El País, Antena 3, El Mundo, Público, La Vanguardia, etc.) a un Pizarro inexperto y nervioso. Solbes se mostró como un viejo zorro y venció con claridad.
Duro golpe para un PP que había depositado buena parte de sus expectativas en un fichaje estrella que les ha salido un poco rana. Pero esté es sólo el primer asalto de la campaña. La emoción sigue aún servida.
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